El mantenimiento preventivo generalmente incluye dos tareas: la predicción de fallas y el desarrollo del modelo de optimización que hará un programa óptimo de las actividades de mantenimiento. El modelo de optimización analiza la carga actual de equipos, el horario de trabajo y el nuevo calendario de compra de equipos. El modelo evalúa los riesgos relacionados con la falla del equipo y el tiempo de inactividad. Las fallas se pronostican utilizando los datos históricos y en tiempo real.